El chip de Obama ¿La marca de la bestia?

Reproduzco esta nota que me parece interesante por su actualidad, son criterios de Dante Gebel, predicador evangélico de origen argentino.
Dante escribe:


Recién publique esta nota, pero quiero agregarle estos puntos importantes: 
1) Me olvidé aclarar que las redes sociales Facebbok y Twitter cruzan TODA la información de tu perfil y lo que escribes con el FBI y el Pentágono de los Estados Unidos (vivas en USA, en Bolivia o en Afganistán). Si te aterra el chip, deberías leer este último mensaje y quemar tu computadora en una hoguera (que te aclaro que también tiene un chip incorporado).
2) El Gobierno sabe exactamente cada sitio que navegas por internet. No existe la navegación personal y privada. Que tu Pastor, tu esposa o tus padres no sepan por donde navegas en la red, no significa que nadie mas lo sepa.
3) Tu celular está interceptado y tiene un chip.
4) A los que dicen: "Jamás me dejaría meter un chip!", es porque vieron muchas películas como Terminator o el Vengador del futuro. Si alguna vez compras el ticket para ir a Disney y quieres cruzar al parque de enfrente, te ponen una marca indeleble en el puño a la salida, que solo es leído por una máquina y si no la tienes, no puedes volver a entrar.

Ahora si, aquí va la nota de nuevo:


Hay un montón de cristianos con miedo por el famoso chip de Obama, y ya me preguntaron varias veces que opino.
Hay algo que tenemos que entender y es muy básico: Todos los seres humanos YA estamos controlados y perfectamente marcados. Desde hace mas de cincuenta años, el mundo es un inmenso estudio tamaño real de Big Brothers (Gran hermano).
El registro de las huellas digitales fue lo primero que se implementó hace varios años, pero si tienes un celular estás siendo interceptado vía satélite y el Gobierno puede ubicarte y escuchar tus conversaciones si es que lo considera necesario y ni hablar de tu computadora o Ipod. 
Del mismo espacio pueden fotografiarte y ubicarte en cualquier lugar del globo en cuestión de segundos. 
Si además usas tarjeta de crédito, tienes un chip de seguimiento de cada movimiento financiero y saben en tiempo real en qué lugar del planeta lo hiciste. 
Si vives en USA tienes un número llamado "Social Security" con el que no puedes comprar, vender, rentar, pedir un crédito ni hacer ningún tipo de transacción sin ese número y por el cual te ubican de manera inmediata con la información cruzada que arroja tu propio número y si no lo usas, el mismo sistema de expulsa y te deja expuesto, o sea, que también te ubican.
Qué quiero decir con esto? que dejen de buscar anticristos y marcas de bestias en cada noticia nueva. 
Cuando la Biblia menciona la marca en la frente, no es en sentido literal, no se imaginen que la gente va a andar con un 666 en la frente, sino que habla de un sistema de identificación global y seguimiento (que ya existe, y si estás leyendo este mensaje en tu computadora, estás dentro del sistema). 
Y por otra parte y bíblicamente hablando, el día en el anticristo sea manifestado, la Iglesia de Jesucristo ya no estará en la tierra.
El chip del Presidente Obama es solo un tecnicismo; con chip o sin chip, el Gobierno de los Estados Unidos tarda menos de 60 segundos en ubicar a cada persona que vive en este país, sabe cuanto gana al año, en qué cree, su estado civil, que come, donde come, lo que hace en los ratos libres y lo que tira a la basura. El chip es solo un método para que a los seguros médicos y hospitales se les facilite la atención a los pacientes. No es ni mas ni menos demoníaco que el número de seguro social (que en USA no es solo para la salud y lo necesitas para ir a la esquina) ni es mas o menos serio que un pasaporte.
Pongámonos serios y dejemos de salir de cacería de brujas.
En mis tiempos de adolescente el gran terror eran los Pitufos, la brasileña Xuxa y Bill Gates (este último juraban que era el anticristo, hasta que apareció Steve Jobs y ahí cambió la revelación) Ahora no se la agarren con el chip de Obama.
Por esta nota van a saltar algunos con que niego el arrebatamiento otra vez. No niego nada, solo digo que usemos el valioso tiempo en predicar todo el consejo de Dios y no nos preocupemos en buscar marcas de bestias. 
En todo caso, no seamos nosotros los bestias que no predicamos la salvación a un mundo que pide a gritos la manifestación de los hijos de Dios. 
Maduremos de una bendita vez y que el Señor nos sorprenda con su venida como ladrón en la noche y nos halle cumpliendo la gran Comisión, que justamente no es buscar dónde está la bestia, sino predicar el Evangelio.